Blog

Η Λευκορωσία γιορτάζει τις προεδρικές εκλογές χωρίς επιλογές για να βγάλει το Lukashenko από την εξουσία

3views

El presidente de Bielorrusia, Aleksander Lukashenko, pasa este domingo el examen de las urnas y se prevé que sea un mero trámite para el mandatario, que lleva desde 1994 sin que nadie le tosa. Es casi más importante la participación, por la legitimación que le da al proceso electoral, que el resultado, que está prácticamente garantizado. Las calles de Minsk, la capital, están llenas de anuncios que recuerdan la gran cita electoral. Anuncios en la casa de los Sindicatos, el Palacio del Deporte, en las estaciones de metro, en marquesinas y otros lugares públicos remarcan que el 26 de enero se vota. Un 17,67% de los bielorrusos ha votado anticipadamente.

A pesar de la previsibilidad, estas elecciones son claves para un país muy cercano y dependiente de Rusia. Después de las decepciones geopolíticas de Georgia y Ucrania, que se distanciaron de Moscú a pesar de que el país euroasiático las considera parte de su legítima zona de influencia (aunque Tiflis parece dar pasos atrás actualmente), que Minsk lo hiciera sería un duro golpe moral. “Nada puede salir mal” podría ser uno de los lemas de las autoridades rusas y bielorrusas para esta cita electoral. “Ahora que (el Gobierno de Lukashenko) arrancó de raíz toda la disidencia en el país, el apoyo financiero de Moscú aún juega un papel importante a través de importantes subsidios que Rusia no piensa parar”, señala a EL PERIÓDICO Tadeusz Giczan, periodista independiente bielorruso.

Lukashenko, un líder de corte socialista, autócrata y experimentado, busca renovar una vez más su mandato, al menos hasta 2030. En 1994 consiguió llegar a la presidencia después de la promesa de arreglar la maltrecha economía bielorrusa. Pudo cumplir dicho objetivo revirtiendo muchas políticas liberales que aplicaron vecinos como Rusia y Ucrania. El precio que los bielorrusos pagaron por estas medidas, que convirtieron su país en el más similar a la URSS de toda Europa, fue la eternización de Lukashenko como líder autoritario de este país del este.

Oposición controlada

Junto al actual mandatario bielorruso, también se presentan el comunista Serguéi Syrnakov, el liberal Oleg Gaydukevich, el socialdemócrata Aleksander Khizhyak y la empresaria Hanna Kanopatskaya, que competirán por el segundo puesto. Tal y como sucede con su homólogo ruso, Vladímir Putin, y el partido Rusia Unida, oficialmente Lukasehnko se presenta como candidato independiente, aunque cuenta con un partido, Belaya Rus, que le sirve como apoyo a nivel nacional. Dicha formación se creó únicamente con el propósito de apoyar al mandatario como una asociación y en 2023 se institucionalizó como partido.

La opción menos oficialista es la única mujer que se presenta en esta ocasión, que quiere restaurar símbolos de la Bielorrusia de los años 1990-1994 (los que usa la oposición), distanciarse de Rusia y liberar presos políticos. Según Giczan, “es una candidata ‘sparring’, como el resto de aspirantes”. “Le permitieron registrarse a pesar de no presentar las 100.000 firmas necesarias para registrarse como candidato”, recuerda el periodista. Kanopatskaya había formado parte previamente del partido de centroderecha liberal Partido Cívico Unido, que desde 2023 está prohibido.

Syrnakov, por su parte, busca mantener el carácter socialista de su país e incluso su formación política, el Partido Comunista, declaró que no irá a las urnas contra el actual presidente, sino “junto a él”.

Tal y como sucede en Rusia, el partido Liberal-Demócrata es una formación populista de tendencia derechista. Las siglas de la versión rusa son LDPR, mientras que la bielorrusa es LDPB. No cuenta con democracia interna y la ha dirigido una única familia, la Gaidukevich. Actualmente Oleg es quien está al mando desde 2019. Su precedesor fue su padre, que fue quien lo fundó en 1994.

El socialdemócrata Khizhyak es el quinto candidato y un ferviente defensor de aumentar la cooperación con Rusia en todos los ámbitos. Cree que Minsk debería estrechar los vínculos con el Estado de la Unión, los BRICS y la Unión Económica Euroasiática, entre otras organizaciones estrechamente relacionadas con Moscú. 

Leave a Response